Por Ivan Gomez
En el estado de Ohio, las recientes políticas migratorias implementadas por la administración del presidente Donald Trump han generado un clima de temor e incertidumbre entre las comunidades inmigrantes. Las redadas del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) han impactado tanto a inmigrantes documentados como indocumentados, afectando a las comunidades locales.
En ciudades como Cleveland y Columbus, se han reportado redadas en lugares previamente considerados seguros, como hospitales, escuelas y lugares de culto. Estas acciones han provocado que muchas familias inmigrantes vivan con miedo constante, evitando salir de casa incluso para trabajar o llevar a sus hijos al médico.
En Springfield, Ohio, hogar de una comunidad haitiana significativa, los residentes han recurrido a la religión para enfrentar el miedo a la deportación. Muchos asisten a servicios religiosos en busca de consuelo y orientación sobre cómo lidiar con posibles encuentros con agentes federales. El temor se ha intensificado debido a rumores y desinformación, incluyendo afirmaciones infundadas sobre comportamientos de la comunidad haitiana, lo que ha exacerbado la división y el sentimiento antiinmigrante en la ciudad.
A pesar de las políticas federales, algunas jurisdicciones en Ohio, como los condados de Franklin, Hamilton, Lorain y Mahoning, han adoptado políticas de “ciudades santuario”, limitando la colaboración con ICE y protegiendo a los inmigrantes de deportaciones sin respaldo legal.
Sin embargo, estas políticas locales están siendo desafiadas por propuestas legislativas a nivel estatal. El Proyecto de Ley 26 de Ohio busca obligar a las autoridades locales a colaborar con ICE, eliminando las políticas de ciudades santuario y penalizando a los municipios que no cumplan con una reducción del 10% en ciertos fondos estatales. Esta medida ha sido criticada por defensores de los derechos civiles, quienes argumentan que fomentará el perfilamiento racial y socavará la confianza entre las comunidades inmigrantes y las fuerzas del orden.
En este contexto, las comunidades inmigrantes en Ohio se encuentran en una situación de vulnerabilidad, enfrentando políticas contradictorias a nivel local y estatal. Mientras algunas ciudades buscan proteger a sus residentes, otras medidas legislativas amenazan con aumentar la colaboración con las autoridades federales de inmigración, intensificando el clima de miedo e incertidumbre.
Es fundamental que las comunidades afectadas se mantengan informadas sobre sus derechos y busquen apoyo en organizaciones locales que ofrezcan asistencia legal y recursos para enfrentar esta situación. La solidaridad y la resistencia comunitaria son esenciales para proteger a quienes se encuentran en situación de vulnerabilidad frente a las políticas migratorias actuales.